kit de investigación mortal. |
Basado en la serie policíaca, el kit de investigador CSI Crime Lab. Traia todo lo necesario para que los niños pudieran recolectar huellas digitales y meterse en el papel de un policía investigador. Pero el polvo que se usaba para “investigar” contenía un alto porcentaje de asbesto. Un componente que provoca intoxicaciones y se relaciona con el cáncer de pulmón.
Tuvo que ser retirado del mercado en el 2010.
kit con uranio |
En los años 60s se vendió un kit para que los niños aprendieran y enseñaran con productos químicos. Tenían bastantes compuestos que podían mesclar entre sí, se suponía que era inofensivo pero el uranio que contenía tenia altos niveles de radiación, por si fuera poco, había instrucciones para que los niños fabricaran bombas. Claro está tuvo que ser retirado de las tiendas.
gomitas alucinogenas |
Un autentico descalabro para la industria fue Aqua Dots. Unas pelotitas como canicas que al ser mojadas se podían unir unas con otras y formar figuras con ellas. El juguete prometía ser un éxito. Pero como sucede con regularidad a algún niño se le ocurrió meterse una bolita a la boca…
El pegamento con que se fabricaron reacciona con la humedad y libera una sustancia peligrosa llamada Butanediol el cual es un compuesto en una droga llamada “buenas noches cenicienta”. Las demandas de los padres hicieron que la empresa fabricante pagara más de 1.2 millones de dólares y retiro el producto del mercado.
dinosaurios mortales |
Estas inocentes figuras de goma que al ser mojadas crecían su tamaño, prometían ser muy divertidos. Pero su apariencia los hizo que los niños los confundieran con galletas y dentro del estomago los animalitos crecieron. Hubo muchas víctimas mortales por estos juguetes.
muñecos mocha dedos |
En los 80s esta muñeca se hizo muy popular, su apariencia infantil y regordeta. Podía imitar a los bebes como masticaban pues traía un pequeño motor que activaba las mandíbulas, el problema surgió cuando los niños introducían sus dedos en la boca. El muñeco daba buenas mordidas y podían incluso arrancar dedos, de hecho arrancaron varios y las demandas no se dejaron esperar.