1.- Acumuladores compulsivos sin predilección
Los acumuladores compulsivos sin predilección puede ser cualquier persona que tiene la manía de juntar de la basura o comprar hasta un pedazo de plástico roto, unicamente por creer que alguna vez en el futuro, ese pedazo de plástico le puede ser de utilidad. Comúnmente acumulan periódicos viejos, revistas, zapatos, ropa, juguetes, en general cualquier tipo de objeto que piensen que les sera de utilidad alguna vez en su vida, sin tener una preferencia definida en realidad.
2.- Acumuladores de chatarra
Este tipo de acumuladores suele acumular chatarra que piensan que pueden valer algo como una antigüedad, o que puede valer algo por ser un objeto raro (es raro para su punto de vista). El problema que tienen este tipo de personas es que no les importa que la cantidad de objetos que recopilan llegue a ser tan grande que ya no quepan ni en su propia casa. También suelen no tener cuidado alguno con el mantener los objetos en un lugar donde no se vean afectados por el clima, pues los dejan a la intemperie y algunos de estos tipos de personas suelen hacer tonterías como enterrar sus objetos directamente en la tierra sin protección alguna, según ellos para protegerlos de los ladrones, pero en cambio la tierra pudre los objetos haciéndolos inservibles después de unos meses de estar enterrados, y lo que hace que aunque el objeto enterrado tuviera un valor por ser una pieza única, al dejarlo pudrir debajo de la tierra pierde su valor por completo.
3.- Acumuladores de ropa o zapatos
Este tipo de acumuladores se enfoca en acumular ropa o zapatos o ambos, es decir que siempre que puede se compran zapatos o ropa nueva, sin importarles que se queden sin dinero suficiente para la comida y el mantenimiento de su casa o departamento. Comúnmente este tipo de personas suele quedar a deber mucho dinero a las tarjetas de cedrito, a causa de su enfermedad compulsiva, o deja endeudado al cónyuge a causa de sus compras compulsivas .
4.- Acumuladores que coleccionan Vehículos
Este tipo de personas son parecidas a los acumuladores de chatarra, ya que suelen gastar grandes cantidades de dinero en la compra de vehículos, y después de hacerlo simplemente los dejan pudrir, dejándolos sin protección a la intemperie, pudriéndose con la lluvia y desgastándose por el polvo, ademas que por no darle mantenimiento periódico a los vehículos, terminan por dejar inservibles los motores y otras piezas de los vehículos.
5.- La enfermedad compulsiva de los acumuladores
Todos los acumuladores comparten la misma enfermedad compulsiva, ya que es sumamente difícil el obligarlos a deshacerse de sus cosas, a pesar de que estas no tengan ningún tipo de valor, y si se logra que se deshagan de sus cosas, estos por lo regular vuelven a volver a comportarse igual y vuelven a conseguir objetos de manera desmedida.
La diferencia con los coleccionistas
Los Coleccionistas se pueden diferenciar de los acumuladores principalmente en que un coleccionista si se puede desprender de uno de sus objetos sin problema alguno, bajo ciertas circunstancias, como por ejemplo intercambiar un objeto propio por otro de mayor interés, es decir que hacen intercambios sin remordimiento alguno. Y puede haber coleccionistas que coleccionen tapas de botellas de soda hasta incluso coleccionistas de aviones, u otros objetos mas caros, pero lo que tienen en común todos los coleccionistas es que todos cuidan de sus objetos evitando que el tiempo los deteriore lo máximo posible, también tienen conocimiento de conservación y de valor, es decir que saben que por ejemplo un objeto como una moneda, nunca se debe pulir, pues perdería gran parte de su valor. Y en caso de emergencia pueden desprenderse de sus objetos vendiéndolos por necesidad, de forma mas sencilla de lo que es para un acumulador.
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